Pues, hoy tomaba mi café matutino,
uff! un andatti delicioso que de verdad me encantó.
Cuando estaba formada para pagarlo, un sujeto entra
en la fila y se pone delante de mí.
-Este... con permiso.- Voltea y me ve con cara
de repugnancia, maldito. ¬¬ Ok no, sólo que moría del
coraje. Incluso llegué a pensar en arrojarle el café xD
Luego, me di cuenta de que realmente estaba delicioso y
no se lo arrojaría. Además no soy de ese tipo n.n
A pesar de que me criticó mi corte de cabello y mi ropa.
Y de que me dijo marica. :@ Más marica él. Haha bueno no,
pero Odio que la gente se meta en las filas, lo demás no
me habría importado xD Pobre tipo, ni que estuviera de moda. (x
En fin, lo dejé seguir (para no armar problemas).
Cuando llegó a la caja, le dice la cajera que debe
esperar su turno, que se forme y que me atenderá a mí :D
JAAAAAA; el bien siempre triunfa sobre el mal! Ingenuo...
Me encantan este tipo de situaciones xD Donde las personas
que menos lo esperas son las que le dan clases de moral
a la gente egoísta y poco tolerante.
De verdad, amo esos momentos, aunque me saquen canas a veces.
Qué haríamos sin gente así. :)
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